miércoles, 26 de agosto de 2009

FILOSOFIA DEL ARTE

Aristóteles
1.- EL PROBLEMA DEL ARTE
El problema del arte como el de la belleza, es un problema de definición, de fijación de su concepto, caracteres y fines; en suma, de determinación de lo que se entiende por arte y de lo que este es o debe de ser.
Este planteamiento suscita muchos problemas, pero cuatro son los fundamentales:

a) Significado de la palabra arte
En la filosofía antigua la palabra arte tuvo un significado muy amplio. Así, Platón entendía por arte “todo conjunto de reglas idóneas para dirigir un actividad cualquiera”. Según esto, no hay diferencia ente arte, ciencia y técnica, pues la amplitud del concepto platónico abarca toda la actividad humana ordenada conforme a reglas eficientes.
Aristóteles restringió normalmente la extensión del concepto del arte. En primer lugar incluyó la ciencia, porque ésta se ocupa de lo necesario, es decir de lo que no puede ser diferente de lo que es. En segundo lugar dividió todo lo que esta fuera de la ciencia o sea lo posible y contingente, en dos grupos: lo que pertenece a la acción y lo que pertenece a la producción. En este ultimo grupo ubica el objeto del arte y lo define como “El hábito de producir cualquier cosa acompañado de la razón”. Así pues para Aristóteles son artes la Retórica, la Poética, la Arquitectura, las artes manuales o mecánicas, la Medicina, etc., porque todas ellas tienen por objeto lo posible y contingente; en cambio no son artes la Lógica, la Física, la Matemática, etc., porque su objeto es lo necesario.
Como se ve a pesar de la restricción que hace Aristóteles, el término arte siguió abarcando demasiado y se le empleó para designar unas veces la técnica (artes manuales y mecánicas, por ejemplos); otras veces para designar las ciencias, como cuando en la Edad Media, se llamo “artes liberales” a la Gramática, Lógica, Aritmética, Etc., y también se le empleo para referirse a las artes propiamente tales, como las bellas artes.
Fue Kant quien delimito el concepto de arte, separándolo de los campos de la ciencia y la naturaleza, para referirlo solamente a la producción o realización de obras. Desde este punto de vista distinguió un “arte mecánico” y un “arte estético”; el primero tiene por finalidad cumplir las operaciones para hacer un objeto ; el segundo, o sea el arte estético tiene por finalidad realizar la belleza en la obra que produce.
En la actualidad, la palabra arte aun se emplea frecuentemente con el significado de técnica, pero el uso culto, correcto es el que la refiere únicamente al arte estético, o sea a las bellas artes.

b) El arte y la naturaleza
Muchas definiciones acerca del arte se basan en la relación de éste con la naturaleza. Así, se puede entender el arte como dependiente de la naturaleza; como independiente de ella o, simplemente, como “condicionado”, por la naturaleza. Según sea hay tres concepciones diferentes:

1) El arte es imitación de la naturaleza:
La concepción del arte como imitación es la mas antigua.
Platón, por ejemplo, considera que el arte está subordinado a la naturaleza y que el artista no debe hacer sino la reproducción de la apariencia de los objetos. Aristóteles afirma que “el valor del arte resulta del valor del objeto imitado” y que corresponde al artista el mérito de elegir el objeto a imitarse, Plotino amplia el concepto de imitación y dice: “Si alguno desprecia a las artes porque no hacen mas que imitar las cosas naturales, es necesario decir que las artes no solo imitan directamente los objetos visibles sino que se dirigen a las regiones de las que ellos dependen, y así pueden hacer muchas cosas por su cuenta y agregar lo que falta a las cosas naturales”. Pues, según Plotino, el arte no imita solamente las apariencias sensibles de las cosas naturales, sino también la realidad superior inteligible (no sensible) y esto es lo que puede agregar a la naturaleza, pero aun así la concepción de Plotino es siempre la del arte como imitación, y según esta, el arte tiene carácter pasivo, receptivo, no creador.

2) El arte es creación:
En cambio en la doctrina del arte como creación, este es “originalidad absoluta y sus productos son creaciones que no derivan ni se reducen a la realidad natural, porque el arte no reproduce algo existente, sino que produce siempre algo nuevo, crea una nueva situación espiritual, y por lo tanto no es imitación sino creación”. Esta concepción pertenece a la Filosofía romántica del siglo XIX, entre cuyos representantes mas notables se pueden citar a Federico Schelling, Johan Fichte, Benedicto Croce, y Hégel.

3) El arte es construcción del artista inspirada por la naturaleza:
La tercera concepción, o sea la del arte como construcción surge cuando no se considera a la actividad artística como simple imitadora pasiva, ni como creadora absoluta sino como “un encuentro entre la naturaleza y el hombre, encuentro del cual sale por el hombre y la naturaleza”. Kant expresa el carácter constructivo del arte diciendo que es un actividad libre “un simple juego” ose aina ocupación placentera, por sí misma que no tiene necesidad de otra finalidad”
En la estética contemporánea, la doctrina del arte como construcción predomina sobre las demás y tiene ilustres representantes como son: Schiller, Valéry, Dewey, y Pareyson. Este ultimo señala los caracteres de la contrucción artística, en la siguiente forma: “Hacer, inventando al mismo tiempo el modo de hacer, producir la obra inventando la regla individual; obrar de manera que la obra de arte sea al mismo tiempo la norma y el resultado o producto artístico”. Según esto, la obra de arte y su técnica de producción son idénticas. Un ejemplo claro de este modo de entender el arte es el actual “arte abstracto”.

c) El arte y el hombre:
Otro problema fundamental es el de la relación del arte y el hombre. Este también da lugar a diversas concepciones, de las cuales tres son las más importantes:

1) El arte como conocimiento:
La consideración del arte como conocimiento tiene su origen en la antigüedad. Aristóteles fue uno de los primeros en considerarlo así l afirmar que “el arte surge en esa tendencia a la imitación que es un aspecto del deseo de conocer”; asimismo, a propósito de la poesía dice que “es mas filosófica que la Historia”, con lo cual da entender que la poesía por estar mas cerca de la filosofía, tiene mas valor teórico que la historia.
Pero fue la filosofía romántica que (XIX) la que mas insistió en el carácter cognoscitivo del arte, Schelling afirma sin rodeos que “el arte es el órgano general de la filosofía, por cuanto recoge en una síntesis los resultados de la actividad consciente y de la inconsciente”. Lo mismo Hegel: dice que “el arte es el mas alto conocimiento intuitivo de lo particular “. Por ultimo, Fiedler ha dicho; “Solo la verdad y el conocimiento parecen ser la única ocupación digna del hombre y si se quiere asignar al arte un puesto entre las mas altas tendencias del espíritu, es necesario señalarle como fin solo el salto hacia la verdad, empuje hacia el conocer”.

2) El arte como actividad practica:
La concepción del arte como actividad práctica también pertenece a Aristoteles, y es su tesis principal, es decir que predomina sobre la que también él expuso acerca del arte como conocimiento.
Aristóteles- recuérdese-hizo l gran división en ciencias practicas y ciencias teóricas y ubico el arte en el dominio de lo practico como objeto de la “Poética” o ciencia de la producción (del hacer obra). Esta tesis, del arte como actividad practica tuvo poco éxito y rara vez se ha repetido. Sin embrago puede considerarse dentro de ella la concepción del arte como juego, que recientemente en la época contemporánea, expuso Herbert Spencer, considerando “el arte como un juego que se ha desvinculado de su finalidad de aprendizaje, biológico y ha resultado finalidad en sí mismo”.
Fue, sobre todos, Federico Nietzsche (1844-1900) quien insistió en acentuar el carácter práctico del arte “viendo en él una manifestación de la voluntad de dominio”. El arte según Nietzsche, está condicionado por un sentimiento de fuerza y de plenitud, y “es una exaltación del sentimiento de la vida y un estimulante de la vida”.

3) El arte como sensibilidad:
Es una teoría platónica que reapareció en el siglo XVIII. Es la misma que expuso Baungarten cuando introdujo el termino “Estética” como nombre de esta disciplina. Según la doctrina del arte como sensibilidad “la fantasía es tanto mas fuerte, cuando mas débil es el raciocinio”. La fantasía es definida por Giovanni Battista Vico (1668-1744) como “la facultad que altera y adultera las cosas”, es decir, la que produce la obra de arte, y, siendo mejor cuando menor es el raciocinio, lógicamente predomina la sensibilidad, esta es una de las tésis mas aceptadas en la Filosofía Contemporanea.


d) La tarea del arte:
El cuanto aspecto del problema del arte se presenta al tratar de determinar la tarea, función o deber que este cumple, o debe cumplir, ya que todas y cada una de las actividades humanas tienen correspondientes fines.
Las teorías que dan respuesta a esta parte del problema se separan en dos grupos bien distintos:

1) La idea que considera el arte como un medio educativo:
Es la mas antigua y la mas difundida. Así por ejemplo, Platón condenó el arte imitativo por considerarlo anti-educativo, con lo que, lógicamente, da a entender que el arte para ser aceptado debe ser útil instrumento de educación. Asimismo, Aristóteles decía: “La música no debe ser practicada solo para deleite para usos múltiples, ya que puede servir para la educación”. Lo que dice de la música puede aplicarse a todas las artes.
El concepto del arte como instrumento de educación perduró casi sin variantes hasta después del renacimiento. Fue Giovanni Battista Vico quien preciso como fin educativo del arte el perfeccionamiento moral; dice por ejemplo, que “el fin que deben proponerse los poetas es el de enseñar al vulgo a obrar virtuosamente, tal como ellos se enseñaron así mismos”.
Por su parte, Hegel dice que la “finalidad del arte es la educación hacia la verdad, de la cual es consecuencia inevitable el perfeccionamiento moral”. Pero agrega: “la educación hacia la verdad no es menor que la educación moral, por lo cual el deber del arte es producir la muerte del arte; esto es, pasar (a través del arte) a esas formas superiores de revelación de la Verdad Absoluta, que son Religión y la Filosofía”.
A las anteriores teorías, que ven en el arte un instrumento educativo para los fines de la moral y del conocimiento, se han agregado, en estos últimos tiempos, las que ven en él un instrumento de educación política. Según estas teorías, las obras de arte tiene el “compromiso” de servir a los fines e ideales políticos, en los cuales se manifiesta el anhelo y la necesidad de alcanzar el mas alto grado de bienestar. Esto exige que el artista salga de su “torre de marfil”, es decir de su aislamiento y que sea un “comprometido”; que asuma una doctrina política precisa que se defina y ponga al serbio de los grupos sociales mas numerosos y menos privilegiados, de tal suerte “que sus obras de arte ayuden en los esfuerzos de liberación y de conquista del poder”. Esta tesis del arte, como instrumento de educación política al servicio de los oprimidos y los explotados, se apoya en la ideología comunista.


2) La teoría del arte como expresión
Consiste en considerar el arte como un fin en si mismo: “El arte por el arte” es la formula que usualmente se emplea para exponerla. Según esta teoría, las experiencias, las actividades y en general las actitudes humanas, coronan y se exteriorizan en la expresión misma.
“Lo característico de la actitud expresiva es que plantea como finalidad lo que para otras actitudes es un medio. Por ejemplo, VER. que es un medio para orientar los movimientos, resulta un fin en el arte, ya que el pintor no quiere mas que VER y HACER VER”. lo mismo puede decirse de la música y de todas las artes en general.
Sostiene esta teoría que el arte es completamente libre; que no tiene compromiso de ninguna índole, y que no es instrumento al servicio de otros fines. Pues filosóficamente hablando, el “compromiso”, ya sea el servicio de la moral, o del conocimiento o de la política, hace perder al arte su autonomía; lo hace depender de fines ajenos a su campo; también limita la libertad creadora del artista, quien, de creador libre y soberano tiene que convertirse en intérprete servil; y, por ultimo, “el compromiso” puede perjudicar los propios fines del arte al bloquear, por anticipado inspiraciones y tentativas que no responden a las exigencias morales, científicas o políticas, y que sin embargo podrían ser muy valiosas y fecundas en el campo de las realizaciones bellas estrictamente estéticas.
Esto no quiere decir que el arte es o debe ser útil, pues espontáneamente cumple fines de superación y mejoramiento; pero, sí quiere decir que el arte no debe ser tomado como “Instrumento”, porque ello lo rebaja de su categoría autónoma de actividad con sus propios fines, a la de simple medio o instrumento al servicio de otras actividades.